¿La Espada Vengadora...?

“La espada vengadora de la divina justicia está sobre nuestras cabezas amenazándonos con las tres plagas...”

...Se escribía en el Diario De México el sábado 16 de junio de 1810, día del santo presbítero jesuita Juan Francisco de Regis (aquel que dijo No me sería grata la vida si no tuviere algo que perder por Jesucristo, palabras congruentes para un tipo que andaba de misionero rural agarrándose a las cachetadas con los calvinistas).

Estas palabras en el periódico se veían inspiradas por la situación que vivía la Nueva España durante la invasión napoleónica a la mare’ patria, que junto a una escases de alimentos y la amenaza de una sequía prolongada, pintaban un panorama “calamitosísimo” (palabra usada por el diario) para ese año.

Este era el panorama que hace 200 años contribuiría a la gestación de la, er, Gesta Heroica que posteriormente se conocería como la Guerra de Independencia y aquí en este, su blog de mano amiga, no podemos dejar de sorprendernos por cómo a pesar de la distancia en el tiempo, México se encuentra dos siglos después con situaciones coyunturales similares (en otras palabras: estamos en las mezmas).

Y esas similitudes no solamente se reducen a coincidencias banales, como por ejemplo el hecho de que regresaran recientemente a territorio nacional las banderas insurgentes del General Allende arrebatadas por las fuerzas de Félix María Calleja en 1811 en la batalla del Puente de Calderón y que fueron recibidas por el Sr. Presidente Felipe Calderón, el cual ha batallado en general porque las fuerzas callejeras no le allanen a la gente la libertad de circular por Balderas o Insurgentes...

Lo importante es a final de cuentas recordar qué ha sido lo que nos ha hecho ser reconocidos a nivel nacional e internacional... intentar olvidarlo, fingir un poco de dignidad y continuar hacia adelante; ¡Qué importa que no seamos más que una bola de zánganos arrimados en las tierras de Carlos Slim y demás caciques! El futuro está en creer que somos más que la vulgaridad que nos rodea y aceptar que aunque durante 200 años el maíz solamente ha cambiado de trojes y la barbacoa la seguimos esperando del patrón de la hacienda, no somos el tarugo de nadie, somos nuestro propio tarugo y orgullosos de ello.

El ser objetivo está sobrevaluado, no necesitamos en este país palabras refinadas como “superávit”, “respeto”, “responsabilidad” o “decencia” si tenemos a la televisión para que nos instruya en lo que son los valores o lo que nos vale (aunque a mí me suena como un leproso criticando el acné en la cara de otro) y el fútbol para reclutar santos y héroes.

Así pues, en tres meses a partir de esta fecha recuerde: ponga una sonrisa en su rostro, váyase a las fiestas, coma los antojitos, tómese unos tequilas y olvide por completo que esa celebración es como disneylandia, lo que representa no necesariamente es real aunque sí un negociazo para unos cuantos vivos.

Entonces con orgullo ese día volverá a tomar el estandarte de la virgen, volará las campanas al aire y a todo pulmón gritará:

VIVA MÉXICO....

Atte.

Autor Pre-Crisis

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BTW...

... Ya que hablamos del espíritu patrio, que mejor que uno de los grandes ídolos de la afición mexicana:

Karl Marx

Para dar su opinión sobre los mexicanos, la cual tomamos de una correspondencia personal con su compa del alma, Friedrich Engels, en diciembre de 1847:

Los españoles son de hecho degenerados. Pero tener a un degenerado español es ideal a tener a un mexicano. Todos los vicios de los españoles -- petulancia, grandilocuencia y quijotismo -- se encuentran en los mexicanos elevados a la tercera potencia...

Esos comunistas, ¿No son un amor?

Fuente: Karl Marx's social and political thought: critical assessments By Bob Jessop, Charlie Malcolm-Brown, Russell Wheatley, page 176.

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A Continuación

Un Servicio Público De

Este, Su Blog De Mano Amiga




Alerta-Alerta-Alerta

Queremos advertir a usted, estimado lector, de la nueva amenaza en contra de la humanidad tal como la conocemos:

Los Guajolotes Con Serruchos

Generalmente se puede ver a estos seres acompañados de su entourage, compuesto por los no menos despreciables Guajolotes o Pavos de Sahuayo; si usted ve a uno de estos depravados seres, No, repetimos, NO CONSERVE LA CALMA, de la media vuelta, huya despavorido dando alaridos de terror y rece al cielo (o a la entidad o fuerza ultra terrena que más le convenga y/o agrade) por que haya alguien que corra más lento entre el guajolote y usted.

Por su atención, gracias y que el Gran Pavo En El Cielo lo proteja (y que no le caiga encima).